Creo en la poesía y por ello comparto estos versos

hex0Creer en uno mismo. Creer en ti. No tener duda alguna en saber que eres capaz de alcanzar todo lo que quieras. Que no hay límites. Que el único límite que puede haber eres tú mismo. No dejarse engañar por falsos espejismos. No hacer caso de alharacas que ocultan falsedades. No prestar oídos a cantos de sirenas. Hay que estar atento, pues son muchas las tentaciones que se acercan con el único fin de confundirte y que no alcances la meta que te has propuesto.

Algunas veces perdemos el tiempo. Nos ponemos barreras a la hora de tomar decisiones que debemos adoptar, pero vamos posponiendo, por temores a lo desconocido; a qué sucederá; a si haré lo correcto…; miedos y dudas que nos hacen vivir provisionalmente, hasta que tomemos la decisión acertada sobre nuestra vida y entonces empecemos a vivir… ¿Y qué habrá pasado con ese tiempo consumido?

De estas reflexiones y de experiencias propias nacen estos versos en esta mañana de domingo que ahora quiero compartir contigo. Cada uno tenemos nuestros miedos; nuestra capacidad de decisión; nuestros fantasmas que nos acechan cuando menos lo esperamos… Ante todo eso solo hay una solución: Creer en ti mismo. Saber que no sucederá nada si te equivocas, pues sacarás una enseñanza y te ayudará a avanzar. Confiar en tí. Volverte a encontrar y mirarte a los ojos.

.

Si te apetece puedes escuchar el poema

.

Creer como no recuerdo

haber creído

sentir el palpitar

de todo lo que es alcanzable

y bulle por ser alcanzado

pues vive al alcance de mis manos.

 

Qué ciego he vivido

distrayendo la mirada

en los falsos caleidoscopios

de multicolores mundos

que tan solo formaban parte de un escenario

en el que se representaba

una vida que no era la mía.

 

Despertar del letargo

que la apatía, la desidia y el conformismo

trenzan en hilo de tres hilos

amarrándome sutilmente

a un sueño

que jamás he vivido

a una vida

que jamás he soñado.

 

Creer de nuevo en mí

como nunca antes había creído

descerrajar las cerraduras

que candaban puertas y ventanas

para aventar las pesadillas

fruto del irracional miedo

que nace de la incredulidad dormida.

 

Ayer me desperté

mirándome al espejo

sonrieron mis ojos

al encontrarme de nuevo

después de todo este tiempo

en el que no me reconocí

por más ayeres

en los que cada despertar me mirase

sin encontrarme.

.

😉

.

 

 

 

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *