Cada uno de nosotros, como podemos y dentro de nuestras posibilidades, vivimos en nuestra zona de confort. Eso hace que, de alguna manera, percibamos una sensación de seguridad que procuramos mantener y que nada ni nadie alteren ese ‘orden’. Nos creemos ‘a salvo’. Nos creemos que ‘las cosas’ les suceden ‘a otros’, pero no a nosotros. Sin considerar si esa postura es egoísta o no; si esa determinación no es empática, o es insolidaria; si ese estado, aparentemente protector, es el ideal para nosotros… Deberíamos saber que no es del todo real. Que es un estado temporal que, en cualquier momento, se puede quebrar, y dar un giro de 180º a nuestra vida.
Encarando ya la recta final de esta Biblioteca de Verano, os propongo como lectura, para los mayores de la casa, un libro de relatos escritos por Julia de Castro que lleva por título: ‘La estupidez de creerse a salvo’, y que ha sido editado por ESSTUDIO EDICIONES. Su autora pretende que reflexionemos sobre nuestra vulnerabilidad y sobre la fragilidad de nuestra existencia, sin ira ni ensañamiento. Y para los jóvenes de la casa –y no tan jóvenes–, un curioso, entretenido y simpático álbum ilustrado, editado por FLAMBOYANT, que lleva por título: ‘Manuela para espías’, escrito por Daniel Nesquens, con ilustraciones de Ote Mathías. Si quieres ser un auténtico espía, sin duda, este es tu manual.