Apenas quedan horas para despedir este año y dar la bienvenida a los ‘locos años 20’ que vienen por duplicado. No sé para vosotras y vosotros cómo habrá sido el año que termina. Si antes de dar comienzo os hicisteis alguna propuesta. Si la habéis cumplido. Si queda por cumplir. Si la habéis aplazado. Si algo os ha impedido su consecución. Si para el próximo tenéis pensado o decidido haceros alguna otra. Nueva o repetida. Es irrelevante, si es vuestro deseo.
Hubo un tiempo, creo que hace tanto que no lo recuerdo, cuando yo me proponía: ‘ir al gimnasio’, ‘aprender inglés’, ‘ser mejor en mi trabajo’, ‘hacer una dieta equilibrada’… Cuestiones que, sin dejar de ser importantes, poco me llenaban o conseguían satisfacerme. Entiendo que alguien se proponga alguna de ellas, lo consiga y se sienta feliz. Bravo. Objetivo conseguido. Sin embargo, me paré a pensar qué era lo que realmente quería proponerme para sentirme bien conmigo mismo. Creo que es lo que de verdad cuenta.
No quería hacer una lista interminable e imposible de alcanzar que pudiera frustrarme o deprimirme. El camino se comienza con un paso. Un solo paso. Luego vendrán otros. Cada uno a su ritmo. Cada uno a su tiempo. No quiero vivir como ‘pollo sin cabeza’ que se mueve de acuerdo al ruido de fondo que nos acompaña. Quería centrarme en lo verdaderamente importante. Quería verlo escrito negro sobre blanco (o azul sobre blanco) en unos versos que deseaba compartir. Mis deseos de felicidad acompañarán el año que está por llegar. Feliz 2020.
.
Si te apetece puedes escuchar el poema
.
Para el próximo año que lento asoma
unos nuevos propósitos me quiero plantear
no es algo que deba tomarme a broma
pero no sabría deciros por cuál empezar.
Me propongo adivinar las mágicas formas
que las nubes bajo el cielo quieran dibujar
no tiene por qué atender a normas
tan solo dejar que el viento les invite a bailar.
Seguir escribiendo versos y trovas
que otros alcancen a escuchar
palabras nacidas del corazón a mi boca
manando cual fresco manantial.
Me propongo descubrir lo que sienten las olas
cuando besan con ternura la arena en su arribar
a veces llegan juntas a veces llegan solas
pero siempre su orilla consiguen alcanzar.
Seguir soñando antes y ahora
todo aquello que quiera soñar
sin importar nunca el día o la hora
hasta verlos hechos realidad.
Y si alguien quiere proponer que proponga
más empatía, menos mentiras y más igualdad
no creo que nadie a esto se oponga
pues nunca sobrarán poemas por cantar
un cielo estrellado y una luna redonda
una primavera llena de colores por pintar
unos labios que a besar se dispongan
haciendo que un corazón vuelva a palpitar
y si alguien quiere proponer que proponga
aquí dejo algunos de los que están por llegar.
.
.