Dicen que este domingo ‘tiene una hora más’. Os recuerdo que, simplemente, nos devuelven lo que anteriormente nos quitaron, hace unos meses; otro domingo, en el que muchos de nosotros dormíamos. En cualquier caso, hay comunidades autónomas en las que el próximo martes es fiesta, y nuestros ‘peques’ no tienen ‘cole’ ni lunes ni martes. Por ellos y para ellos estos versos del domingo.
Suelo escribir poemas también para los ‘peques’, con otro ritmo, otra musicalidad, otros temas diferentes a los de los mayores (como es lógico). En esta ocasión, y dado que hoy (al menos por estas latitudes), hace un día primaveral, he querido hacer un homenaje a dos estaciones, el otoño y la primavera. El otoño prepara la vida para el letargo. La primavera despierta la vida de ese letargo. Nunca se darán la mano, pero siempre caminarán juntas.
La lectura de la poesía. La creación de ese ritmo y esa música con la que se adornan las palabras, ayuda al joven lector a percibir su entorno de diferente manera. La poesía es un texto que pasa directamente al corazón, sin detenerse en el estómago. Igualmente nace en lo que vemos y sentimos. Dejadla salir. Dejadla que fluya. Animad a los ‘peques’ a que describan lo que ven y lo que sienten mediante la poesía. Os sorprenderán.
Si te apetece puedes escuchar estos versos:
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Canta canta una canción
a este otoño que llega
después del frío invierno
regresará una nueva primavera.
Traerá blancas nubes, azules cielos
y pintará los campos de colores
la Naturaleza festejará su llegada
adornándolo todo con flores.
El dulce trinar de las aves
nos regalará hermosas tonadas
dormirán las cálidas noches
y despertarán las frescas madrugadas.
El otoño desnudará los árboles
de sus bellos verdes vestidos
cubriendo montañas y valles
alfombrando sendas y caminos.
Nacerán champiñones y setas
y podremos comer castañas
a mi no me gustan cocidas
siempre las preferí asadas.
Saludemos la nueva estación
que nos regala la Madre Tierra
y cantémosle una canción
a este otoño que llega.
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😉
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