No sé a qué esperan nuestros gobernantes para tomar una ‘verdadera decisión’ en cuanto al asesinato de mujeres a manos de hombres. Y NO digo de muertes, como se puede leer o escuchar en algunos medios o declaraciones. No hay eufemismo que valga. ASESINATOS. Asesinatos de mujeres por el hecho de ser mujer. Tengo la impresión de que se culpabiliza a la mujer y NO a su acosador. La mujer tiene que huir (o intentarlo), dejar su entorno (o intentarlo), mientras su acosador ‘vive libre’. De verdad que alguien en su sano juicio puede entender que sigamos cada vez peor. Al menos, esa es la sensación y el sentimiento.
Se han preguntado los hombres y mujeres que nos gobiernan por qué no se denuncian más casos. ?No será por miedo? ¿No será por falta de apoyo? ¿No será por falta de recursos? ¿No será por falta de credibilidad? ¿No será por el sentimiento de soledad que las acompaña? ¿No les parece a las mujeres y hombres que velan por todxs nosotrxs, que ya está bien? Que ya es hora de tomar medidas efectivas. Policías preparadas y formadas. Juzgados preparados y formados. Recursos necesarios para acabar con todo esto de una vez por todas. No obstante, hay muchos hombres que nos situamos al lado de las mujeres.
El asesinato de una mujer es el peor de los desenlaces de una vida llena de tormentos y amenazas. No importa si perteneces a una clase u otra. Solo importa si eres mujer. No voy a callar mi voz; no voy a dejar de gritar en mis versos mi vergüenza, mi dolor, mi indignación por tan viles asesinatos. Y a los hombres que puedan leer este texto y estos versos. Pensad. Y volver a pensar. No a las risas de chistes machistas (no ayuda). No a pasar por redes chistes machistas (no ayuda). No a justificar cualquier abuso de hombre sobre mujer. No. Y mil veces NO. No silenciaré mis versos. ¡¡Basta ya!!
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Si te apetece puedes escuchar el poema
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¿Hasta cuándo?
Quizá la más sencilla de las preguntas
para la más sencilla de las respuestas.
¿Hasta cuándo?
No son números
no son estadísticas
no son personas anónimas
tienen nombre y apellidos
y rostro de mujer
y voz de mujer
y cuerpo de mujer
y solo por ello son asesinadas
sin que se ponga el efectivo remedio
que acabe con estos asesinatos.
En ocasiones ese es el punto final
de unas historias llenas de vejaciones
de unas historias plagadas de abusos
de unas historias de injustificadas violaciones
la supremacía del hombre sobre la mujer.
¿Qué supremacía?
¿Qué superioridad?
Se empieza en los hogares
y se continúa en los colegios
se mantiene en las calles
y se traslada a los trabajos
se enseña por hombres y mujeres
y se pretende perpetuar por mujeres y hombres.
¿Hasta cuándo?
¡¡Basta ya!!
Siento vergüenza de los que se dicen hombres
y desprecian a las mujeres
ni son hombres ni lo fueron nunca
mismos derechos entre él y ella
mismas oportunidades entre ella y él.
¿Es esta la sociedad que queremos crear?
¿Este es el mundo que queremos dejar?
¿Hasta cuándo?
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