Qué importante es no perder la capacidad de soñar. No deberíamos olvidar nunca que los sueños nos pueden ayudar a alcanzar lo inalcanzable. A lograr lo imposible lograr. A tocar la felicidad con la yema de los dedos. Todo ello, no obstante, no debe ser una obsesión, pues pudiera ser que ese sueño se ‘escapase’ o, sencillamente, no fuera un buen sueño al que perseguir, y NO pasa nada. Es un sueño, NO una obsesión.
Cada día de nuestra vida, incluso desde la niñez, estamos tomando decisiones, y la que adoptemos en cada momento nos llevará por un camino, por un solo camino habiendo desechado muchos otros. No sucede igual con los sueños, pues podemos elegir varios sueños a la vez, incluso descartarlos, sin que ello deba ocasionarnos tristeza o desilusión. Es importante, muy importante, soñar, pero lo es aún más, el NO perder la capacidad de seguir soñando.